Bloque 1. Análisis del libro: "El pequeño vampiro".

 

      FICHA BIBLIOGRÁFICA

La edad en la que me baso para realizar este análisis es desde los 9 a 10 años. He elegido esta edad ya que los niños ya reconocen el humor en el lenguaje y se interesan por las aventuras y suspense .Temas como vampiros, brujas, zombis o fantasmas son atractivos para muchos de ellos.

La autora de "El pequeño vampiro" Ángela Sommer-Bodenburg nació en 1948 en las cercanías de Hamburgo (Alemania). Cursó estudios de Sociología y Pedagogía y fue profesora de Primaria durante doce años. El pequeño vampiro es el primer libro de los quince protagonizados por Antón y Rüdiger. El éxito ha llevado al Pequeño vampiro a cine, teatro y televisión.

En cuanto al formato, tiene tapa semi-rígida. El libro posee un tamaño adecuado (20 cm x 12 cm) y 190 páginas. Creo que es un libro que se adecua perfectamente a la edad seleccionada, tanto en tamaño como en manejabilidad (Tiene más de 100 páginas, márgenes moderados e ilustraciones adecuadas al contenido),

La portada tiene un dibujo sencillo y de colores más bien oscuros, muestra a un vampiro con una expresión entre maligna y divertida, lo cual puede hacerla atractiva para los niños de esta etapa de segundo ciclo de primaria, que están en un momento en el que les atrae la intriga por lo desconocido que puede generar este tipo de personajes.

Las ilustraciones son muy sencillas, en blanco y negro, ocupan casi una página y no aparecen en todos los capítulos. Relacionadas con el texto y repartidas a lo largo del libro. Al comienzo del libro vemos unas ilustraciones del rostro de los personajes junto con una pequeña descripción nos introducen a los distintos personajes que se presentan en la historia.

La tipografía es adecuada, ni demasiado grande ni pequeña, con líneas espaciadas y márgenes moderados, lo cual resulta muy conveniente para un niño de 9 o 10 años haciendo que no le resulte difícil seguir la historia.

El contenido del libro se basa principalmente en la amistad entre Anton, un niño humano, y un vampiro llamado Rudiger, que un día aparece en el alféizar de su ventana mientras él está solo en casa. Es una amistad entre dos personajes del todo diferentes pero que se hacen amigos con gran rapidez. La amistad entre los dos personajes y las aventuras nocturnas que vivirán, gracias a una vieja capa con la que pueden volar, es el tema principal del libro. Según Francisco Cubells, en esta edad de 9 a 12 años, los cuentos fantásticos y de aventuras son uno de los temas preferidos por los niños, por lo que puede enmarcarse en esta etapa fantástico-realista que señala.

La amistad entre los niños, además del tema principal, es un tema muy recurrente, pues también aparecen un niño llamado Udo, mayor que Anton y Anna, la hermana pequeña de Rudiger. Las diferentes relaciones de amistad que mantiene Anton con ambos harán q los niños se puedan sentir identificados con el personaje. Estas relaciones de amistad donde se ve la sinceridad, la bondad o el afecto desinteresado, son esenciales en estas edades pre-adolescentes donde es muy importante ser comprendidos por sus iguales, por lo que la lectura creo que responde al interés de niños de edades comprendidas entre los 9 y 10 años.

Anna, la hermana de Rudiger, mantendrá una especie de noviazgo infantil con el protagonista, Anton. Esta especial relación que mantiene con ella, con la que Anton no está muy convencido, podría considerarse como un tema secundario. Estas relaciones infantiles entre niños y niñas también harán que muchos se sientan identificados con los personajes.

Por otra parte, Udo parece ser un poco “abusón”, pero Anton sabe salirse con la suya y engañar a Udo no solo para que este no le quite su dinero ni le desenmascare en su visita al cementerio, sino también para que Udo se haga pasar por Rudiger delante de sus padres ante la insistencia de estos por conocerle. Aunque al final los padres descubren el engaño. De aquí creo que los niños pueden deducir que mentir no es la solución a los problemas, sino afrontarlos, tal y como hace Anton más tarde al presentarles a sus padres a Rudiger y a Anna. Igual que hace con Udo, Anton siempre trata de enfrentarse a la situaciones problemáticas que le suceden y buscar una salida airoso, lo cual podría considerarse también como un tema secundario.

La historia comienza cuando a Anton sus padres le dejan solo en casa para poder salir a cenar y a bailar. El niño se muestra contento ante la inminencia de poder estar solo en casa y poder hacer lo que le gusta sin que le molesten ni le reprendan sus padres. Es posible que los niños a esta edad se sientan identificados con esta actitud del protagonista, que quiere estar solo en casa para poder hacer las cosas que le gustan pero que en otras ocasiones no le dejan hacer, en el caso del protagonista es leer historias de terror hasta tarde y ver la película de suspense que echan en la televisión a altas horas de la noche. Al mismo tiempo se retrata el miedo que siente por estar solo en casa y tener que recorrer el pasillo oscuro desde su habitación a la cocina. Son actitudes que se dan en los niños de estas edades, en las que se sienten mayores para realizar algunas cosas pero siguen manteniendo ciertos miedos más infantiles para otras. Enfrentarse a estos miedos y a los miedos que se producen en las aventuras que vive junto a Rudiger, compartir y superar estos miedos, la curiosidad por lo desconocido, así como la transgresión de la norma durante las aventuras que les suceden, son algunos de los temas que se tratan en el libro.

La relación padres e hijos es otro de los temas secundarios del libro. Anton a menudo se queja de la poca atención que le prestan sus padres y del poco tiempo que pasan con él. Un tema con el que algunos niños pueden sentirse identificados en la sociedad actual. Anton siente envidia de la familia de Rudiger cuando este le dice que siempre están unidos y pasan mucho juntos. Trata de contarles a sus padres la experiencia de conocer a un vampiro, pero estos se muestran incrédulos. Muchos niños pueden verse retratados en esta situación de escepticismo entre padres e hijos.
Otro tema secundario podría extraerse de la situaciones con cierto humor negro que se suceden alrededor del cementerio y los muertos, lo cual puede ayudar a desmitificar este tema ataúdes, muertos y cementerios.

En cuanto a la estructura el relato tiene un esquema clásico de desarrollo: inicio, nudo y desenlace.

La narrativa es lineal, con lo cual se adecua a la perfección a la edad de los lectores. En el inicio se plantean algunos de los gustos y miedos del protagonista y se conocen Anton, el niño humano, y Rudiger, el vampiro.
En el nudo se suceden diversas aventuras y se conocen el resto de personajes.
Finalmente en el desenlace, los padres de Anton conocen a los amigos vampiros de este y Anton respira aliviado al comprobar que todo ha salido bien y va a poder seguir viéndolos a pesar de que sus padres no crean en los vampiros.

Anton es el protagonista del libro y tal y como he mencionado anteriormente, creo que los lectores a los que está dirigido el libro pueden identificarse fácilmente con él. Muchos niños se pueden ver reflejados en sus inquietudes o miedos, también en sus gustos por la lectura de terror o las películas de intriga. De igual modo las relaciones de amistad que mantiene pueden parecerse en ciertos aspectos a las que los niños tengan. Así como en la relación que tiene con sus padres, donde encontrarán muchas situaciones del día a día donde poder verse reflejados y en las que ellos se comportarán igual o de otra manera. De la misma manera, casi todos los niños desearían una aventura con vampiros como los que tiene Anton.

El valor principal del que se habla en el libro es la amistad. Las diferentes relaciones de amistad que se dan entre los personajes y como se enfrenta el personaje principal a cada una de ellas. El contraste entre la buena amistad entre Anton y Rudiger y la amistad entre Anton y Udo, se muestra como un punto importante del libro, donde el valor positivo se ve en la amistad generosa y estable entre Anton y Rudiger frente a la amistad interesada y egoísta de Udo y Anton que se muestra como contravalor a la otra. Se puede ver en estas dos diferentes relaciones una evolución en las amistades infantiles. También veo como valor importante la sinceridad, el empeño que tiene siempre Anton por decir la verdad a sus padres es una cualidad importante, a pesar de que sus padres no le crean. El afán de superación de los miedos del protagonista es otro valor que destaca en el libro.
El lenguaje utilizado en general es sencillo y directo, en ocasiones utiliza palabras quizás poco comunes que reforzarán el aprendizaje de la lengua de los lectores. Las frases no son demasiado largas y el humor es una constante en el texto, lo cual ayuda a enganchar a los lectores. En ocasiones el lenguaje se dota de un tono de misterio en el que se describen lugares o situaciones para intentar mantener intrigado al lector.

Como conclusión puedo decir que sí que utilizaría este libro en el aula. Podría servir para hablar de una tema tan importante como la amistad y las relaciones entre las persona, dado los diferentes enfoques de la amistad que hace se dan en el libro, para reflexionar sobre las relaciones de padres e hijos o sobre un tema como por la importancia de enfrentarse a los miedos infantiles en esta edad de los lectores, donde los temores a seres fantásticos e imaginarios o la oscuridad van desapareciendo.

Añado un enlace que propone la editorial Alfaguara y me ha parecido muy interesante para poder realizar actividades relacionadas con el libro “El pequeño vampiro” en el aula.
http://www.leeresunbuenplan.es/wp-content/uploads/GuiaActividades/guia-actividades-pequen-vampiro.pdf

BIBLIOGRAFÍA

“Cómo Educar en Valores". LLORENÇ CARRERAS , NARCEA, 1995.

Méndez, F.X. (1999). Miedos y temores en la infancia.Madrid: Pirámide.

Bautista Salido, Inmaculada. «Ciencia Y Didáctica». Cómo ayudar a los niños/as a superar sus miedos, s. f. http://www.enfoqueseducativos.es/ciencia/ciencia_38.pdf

Apuntes de Literatura española, literatura infantil y educación literaria de 3º Ed. Primaria de Irune Labajo González.